Interesante este cuentito, que seguramente està basado en "hechos reales" de laboratorio.
La acciòn de los monos, (y de los monos "sapiens") a travès del tiempo, se sustenta en conductas aprendidas, que si son buenas reforzaran la confianza y la autoestima del individuo. De lo contrario, lo que se afianzara serà el miedo y el sentimiento de incapacidad.
Nosotros, a diferencia de los animales, razonamos (no siempre... pero bueno), analizando situaciones y circunstancias, para arribar a una conclusiòn.
Sin embargo, la impronta de las experiencias, buenas o malas, nos marcan de manera similar y se van creando paradigmas en lo personal.
Hay, a mi modo de ver, paradigmas sociales y personales.
Quizàs sea un cìrculo de retroalimentaciòn... negativa, claro.

Se afianzan por costumbre y creencia, no por razonamiento.
Ejemplos de paradigmas rotos fueron que la tierra era plana o que la tierra era el centro del universo. Pudieron ser rotos a travès del conocimiento, el anàlisis de la observaciòn... por quienes pudieron abstraerse de pre-concepto alguno.
La presunciòn, el pre- concepto, de que las cosas, "si se hacen asì... por algo debe ser..." supone que ya antes otros, lo probaron "todo" y no funcionò... o que algo es de tal o cual manera, porque ya otros lo pensaron, lo analizaron antes...
Pero esto no es asì. O al menos tan asì...
Puede que no hayamos enfocado el problema con espìritu creativo o innovador.
Vicios, actitudes erròneas, falta de anàlisis y de conocimiento sobre el tema en cuestiòn, de apertura mental, etc, suelen ser las responsables de que "no queramos o no podamos alcanzar la banana..."
Los paradigmas sociales son peligrosos... son esos que nos inculcan para ser manejados... a antojo de unos pocos.
Un ejemplo serìa eso de que "la imagen lo es todo..."

Tener el pre-concepto de algo, es limitar, atrofiar la capacidad creadora, la visiòn nueva.
A mi modo, es mil veces preferible la duda, que el pre-concepto...
La duda al menos es EXPANSIVA.
Gracias, Silu. Sabroso...
Hermosa frase, la de Einstein... no la conocìa...